Horno de La Colegiala {I Quedada Bloggers Gastronómicos Murcianos}

Este 23 de Febrero he tenido la suerte de poder asistir a la I Quedada Bloggers Gastronómicos Murcianosiniciativa que ha contado con gran acogida entre los que a cocinar/fotografiar comida nos dedicamos. La idea ha surgido de un grupo de bloggeras que hartas de leer sobre eventos de este tipo en otros blogs se han armado de valor y han decidido importarlo a nuestra Región (<<¡Aplausos!>>). Como el evento ha contado con dos partes bien diferenciadas, la primera en el horno de pan de La Colegiala en El Raal y la segunda en el restaurante La Marimorena en Molina, he optado por dedicarles una entrada a cada una y así poder extenderme a gusto sin que esto se os haga ‘más largo que la mili de Rambo’.

El tiempo acompañó al principio de la jornada y pudimos elaborar la masa al aire libre, con un sol maravilloso. David, el estupendo panadero que nos acompañó toda la mañana y nos explicó los intringulis de la elaboración del pan, mezcló agua, harina y levadura y poco a poco los bloggeros nos fuimos animando a meter la mano y pringarnos para darle un aspecto consistente a la masa. Una forma sana y productiva de hacer músculo en los brazos a la vez que resolvíamos todas nuestras dudas existenciales sobre panadería («¿Qué es la famosa masa madre?» «¿Cuántos tipos de levadura existen?»….).

Una vez preparada la masa llegó el turno de amasarla y darle forma. David nos explicó las dos técnicas más empleadas: la tradicional, realizando movimientos circulares de arriba a abajo sobre la mesa, y la francesa, golpeando la mesa con la masa. A la hora de darle forma cada uno tiró por su camino y se vieron tanto clásicas barras alargadas como panes circulares, barras trenzadas y roscas. En este punto destacaron  los que habían asistido a cursos sobre panadería -como Carlos, de ‘Vegetal y tal‘, que aunque no se pringó nos dio buenos consejos- y los bloggers más dulces -como Adela, de ‘Mmm, ¡Que bien huele!‘- con la experiencia que la repostería te aporta.

Tras el duro trabajo los amigos de La Colegiala nos ofrecieron un energético tentempié a base de pan con aceite, el almuerzo de los panaderos. Lo acompañamos con una buena charla en la que aprovechamos para conocernos un poquito más entre nosotros.

Puesto el pan a fermentar a una temperatura óptima, entre los 32 y los 35ºC, David nos hizo de guía durante la visita a las instalaciones de La Colegiala. Me asombró que desde un horno tan tradicional en cuanto a instalaciones y tamaño se surtiera de pan recién hecho a todas las colegialas de la Región de Murcia. Esto último es posible gracias a que durante toda la semana el horno tiene un horario 24h non stop, con tres turnos de trabajo, salvo el sábado, el día de descanso en panadería por tradición.

Fermentado el pan, David nos explicó los últimos pasos previos al horneado. Cuidadosamente colocamos el pan sobre una mesa y les hicimos el dibujo de la corteza con un cuchillo. Uno a uno, David los fue colocando sobre las yandas en las que se iban a hornear. Me llamó mucho la atención que estos últimos pasos se realizaran a escasos metros de la tienda que La Colegiala tiene en el propio horno de pan. De hecho muchos clientes y vecinos de El Raal que en ese momento compraban su pan de la mañana se interesaron por nuestra presencia allí.

Y finalmente, después de 25 minutos aproximados de horneado, aquí está el premio a todo el esfuerzo. Creo que en las fotos se nota el orgullo que siento por mi primera rosca de pan (lo siento chicos, la que realizas de pequeño en la Granja Escuela no cuenta). No será la mejor barra de pan -ni siquiera la que mejor sabe- pero, como pasa con los hijos, para mí es la mejor del mundo.